WASHINGTON – Enero fue el primer mes desde el verano pasado que las familias de bajos ingresos de Arizona no recibieron un cheque bajo el programa ampliado de Crédito Tributario por Hijos, lo que dejó a los padres luchando por ayuda y a los defensores preocupados por el aumento de la pobreza.
De julio a diciembre, el Departamento del Tesoro envió alrededor de 795,000 pagos mensuales a familias de Arizona, un anticipo del crédito que obtendrán cuando presenten sus impuestos de 2021. Pero esos pagos, que promediaron $423 al mes a nivel nacional, finalizaron en diciembre, luego de que el Congreso no logró acordar una extensión.
“La pérdida de $300 por niño para un hogar es significativa, por lo que creo que las familias probablemente solo buscan cualquier recurso disponible para ayudar a llegar a fin de mes”, dijo Kelly McGowan, subdirectora de Wildfire, un grupo de defensa contra la pobreza de Arizona.
Ella dijo que su organización ha visto un aumento en el número de personas buscando asistencia para el alquiler desde que los pagos del crédito fiscal por hijos dejaron de llegar.
“Estamos aún recibiendo una abundancia de llamadas para el Programa de Asistencia de Alquiler de Emergencia”, dijo McGowan. “El costo del hogar ha estado creciendo dramáticamente en Phoenix y por todo el estado, por lo tanto, las personas están tratando de tomar ventaja del programa para ayudar a mitigar esos costos y no ser desalojados”.
El Plan de Rescate Estadounidense para el alivio de la pandemia amplió el Crédito Tributario por Hijos, aumentando los pagos anuales máximos de $2,000 a $3,600 por niño elegible y elevando la edad elegible de 16 a 17 años. Amplió la elegibilidad hacia abajo, para incluir hogares que ganan tan poco que normalmente no presentan una declaración de impuestos y permitió que la primera mitad del crédito anticipado para el año se distribuyera en seis pagos mensuales.
Las familias de Arizona que obtuvieron el dinero tenían más probabilidades de usarlo para necesidades básicas como alimentos, facturas esenciales, ropa u otras necesidades para sus hijos, según un análisis de los datos de la Oficina del Censo realizado por la Universidad de Washington y la Universidad Estatal de los Apalaches. Alrededor de 1,3 millones de niños de Arizona eran elegibles para la financiación del crédito fiscal, según el Departamento del Tesoro.
“Estamos hablando de graves consecuencias para las familias que pueden haber estado luchando con sus gastos domésticos habituales, hogares que podrían haber estado en viviendas inestables, los padres pueden estar reincorporándose a la fuerza laboral y necesitan un impulso adicional para cubrir algunos de estos gastos mientras vuelven a aumentar sus salarios”, dijo Andrew Sugrue, subdirector de políticas y defensa del Centro de Arizona para el Progreso Económico.
Además de la pérdida inmediata de la ayuda directa, los defensores están preocupados por el impacto que tendrá la pérdida del crédito fiscal en la tasa de pobreza a largo plazo. Un estudio del Center on Budget and Policy Priorities estimó que la cantidad de niños en situación de pobreza podría haber bajado hasta en un 40 % con los pagos mensuales.
Incluso si el programa puede volver a ponerse en marcha, el lapso en los pagos interrumpirá los avances que se han logrado en ayudar a quienes más lo necesitan, dijo Zach Tilly, un asociado de políticas de Children ‘s Defense Fund.
“Y eso es una lástima porque sabemos que si el programa se extiende y los pagos mensuales llegan a todos los niños elegibles, se llega a un punto en el que este programa podría reducir la pobreza infantil en un 40 o 50 %”, dijo Tilly, quien llamó al crédito fiscal la política antipobreza más eficaz de la historia reciente.
Una propuesta para extender los pagos hasta 2022 fue parte de la reconciliación presupuestaria Build Back Better de la administración Biden, pero ese proyecto de ley se estancó en el Senado en diciembre.
Tilly dijo que para continuar reduciendo la pobreza infantil y beneficiar a los niños a largo plazo, los pagos de créditos fiscales deben extenderse no sólo hasta fines de 2022, sino de forma permanente.
“Sin estos beneficios mensuales en efectivo que brinda el programa, es una batalla cuesta arriba armar un conjunto de políticas que le brinden el mismo tipo de reducción de la pobreza infantil que le brinda este crédito”, dijo.
Las familias seguirán recibiendo la segunda mitad del pago del crédito tributario por hijos cuando presenten su declaración de impuestos en primavera. Pero los defensores dicen que para las familias que dependen de los pagos mensuales para mantenerse a flote, la brecha las coloca en una posición precaria.
“Con tanta incertidumbre en este momento, los pagos del crédito para hijos ofrecieron un nivel de previsibilidad para que las familias supieran que iban a tener esta fuente de ingresos impulsada en el transcurso del año”, dijo Sugrue.
Si bien el programa de pago federal se ha estancado, McGowan dijo que los defensores locales están buscando una promesa hecha por el gobernador Doug Ducey en su propuesta de presupuesto para el 2023 que establecería un crédito fiscal estatal por ingreso del trabajo.
“Realmente esperamos que eso sea algo que avance, y ciertamente algo por lo que estamos abogando en esta sesión legislativa, porque funcionaría como un Crédito Tributario por Hijos, así que solo algo de dinero adicional en manos de familias de bajos ingresos para ayudar a cubrir sus necesidades básicas”, dijo McGowan.
Este reportaje fue redactado originalmente en inglés por Cronkite News.